C A P I T U L O 1

SO GOOD 

CAPÍTULO UNO

Oliver

 

— Como pueden ver aún estoy con una gripa de los cojones, no hay otra forma de decirlo porque sencillamente es una mierda estar agripado ¡he probado de todo! Pero cuando me enfermo lo hago como un campeón, duro días y días es como si mi cuerpo intentara ganar a la anterior gripa...

 

Pestañeo.

 

— Eso sonó muy estúpido ¡pero no lo es! En serio, empiezo a creerlo y eso me jode mucho ya que como saben no he subido vídeos hace semanas...y me gusta subir por lo menos tres a cuatro videos por mes y recién ¡con este que es una verdadera mierda! Voy dos.

 

Solté un suspiro para ver hacia la cámara.

 

— Pero aquí va lo que tanto desean ver, así...¡que allá vamos!

 

Terminé de editar lo último del vídeo para subirlo a YouTube de inmediato, no me gustaba la idea de dejar a mis suscriptores sin un vídeo y quería que mis 12.372.086 suscriptores vean que no me he dado de baja indefinidamente.

 

¡No pienso perder mis malditos suscriptores que me costaron una mierda de mal por una puta gripa!

 

Claro que no.

 

Escribiendo el nombre de mi nuevo video dejo que se suba a la red de YouTube mientras saliendo de mi silla gamer voy a mi baño salpicando agua en mi rostro tratando así de sacar las lagañas que están cubriendo mi vista, puedo asegurar que me veo como la mierda de mal.

 

¿Cómo negarlo? He estado sentado allí por más de veinticuatro horas, grabando el vídeo, editándolo, poniéndole sus efectos y si algo le falta y no me gusta pues a hacerlo de nuevo, y hoy dos días después estoy con el culo cuadrado y con un hambre de cojones.

 

Saliendo del baño salgo de mi habitación y es como un mundo nuevo mientras bajo los escalones hacia la cocina donde puedo ver a mi madre correteando de lado a lado mientras busca algo.

 

— ¿Pero donde están?

 

La sigo con la mirada mientras entrando a la cocina abrí el frigorífico sacando un frasco de leche, amo la leche, dejo caer un tantote en un vaso para devolverlo a su lugar sin apartar mi vista de mi madre.

 

— ¿¡Donde están!?

 

— Mamá.

 

Ella salta como si le hubiera pinchado el culo para mirarme asustada.

 

— ¡Oliver! ¡no me asustes así!

 

Rodando mis ojos le doy un sorbo a mi leche deleitado ante su fresco sabor, creo que tengo ganas de cereal de chocolate ¿habrá?

 

— ¿Qué estás buscando? — le pregunté mientras giraba y buscaba en las repisas por una de esas cajas de cereal de chocolate de papá, estoy seguro que debe haber, siempre hay una y...¡aquí está!

 

— Mis pendientes ¡no los encuentro!

 

Veo de reojo una esquinita de la isla de granito negra donde claramente se encuentran unos pendientes negros, suelto un suspiro fastidiado dejando a un lado mi leche y el cereal para ir hacia allí y recogerlos.

 

— Ten, despistada.

 

Ella me mira sorprendida para agradecerme con una sonrisa mientras los coge para de inmediato ponérselos, vuelvo a donde estaba mi leche pero antes de llegar a ella me coge un ataque de estornudos terminando en una tos horrible.

 

Mi madre hace un sonido con su boca.

 

— ¿Todavía sigues enfermo? — asiento sin voltear a mirarla mientras limpio mis manos y las seco con un trapo — Bueno, ayer traje algunos medicamentes ya sabes como soy, busca en el baño allí están.

 

— Okey.

 

Ella asiente mientras sale de la cocina a supongo su cuarto y recoger sus cosas, mi madre es azafata y pasa viajando más de lo que me gustaría...hay veces que no la veo por días o semanas una vez no la vi durante meses y eso se debió a que tuvo que hacer de azafata a un avión que iba a China, para luego quedarse allí un tiempo para aprender el idioma que cuando llegó trajo mil cosas que le había pedido.

 

Soy un YouTuber como seguro ya se habrán dado cuenta, me llamo Oliver, Oliver Roda...LiverMood como me conocen mis subscriptores, si, un nombre algo estúpido pero déjenme ser...cuando comencé era un niño de quince años y ahora siete años después con mis veintidós había logrado llevar algo que comenzó como un juego a algo grande.

 

Pero a parte de ser youtuber también trabajo promocionando ya sea juguetes, ropa, juegos y muchas cosas más...claramente tal cosa lo hago en mi canal de LiverMood y eso llena mi cuarto de muchas cosas como también llena mi cuenta bancaria.

 

Por el momento estoy viviendo en la casa de mis padres, pero sólo hasta que mi casa este decorada por completo...algo que terminará en unos días exactamente este viernes.

 

Luego, adiós mamá y adiós papá.

 

Como también un grandioso adiós al tener que escucharlos decirme que apagase la puta computadora y dejase ya esa mania de hablar como tarado ¡son insoportables! Pero venga, estoy seguro de que todo habrá valido la pena cuando este en mi casa con todos mis juguetes.

 

Y esa casita me valió un dineron que hizo sangrar mi cuenta bancaria, pero para mi suerte un cheque se aproximaba de mi última promoción.

 

— ¡Adiós!

 

La puerta resuena al cerrarse y sé que ya se ha ido y por lo visto estoy sólo, voy hacia mi vaso de leche para correr hacia el baño de invitados yendo hacia donde los medicamentos están guardados, al abrirlos no me sorprendo al encontrarlo más que lleno.

 

No me sorprende, mi madre tiene síndrome de compradora compulsiva de medicamentos.

 

Vaya tia.

 

Con una mueca leo los nombres no sabiendo para que mierda es cada uno ¿cómo saberlo? El internet ayudaría pero aparte de que ya antes había averiguado y sólo me decía que bebiera muchos líquidos aparte de Curam...no tenía las energías para ponerme a averiguar su funcionamiento uno a uno.

 

Algo que si necesito es para este dolor en mi estómago, estoy con diarrea y si eso no es malo pues los gases son peores, y si recordamos que estuve sentado por un buen rato en mi silla especial....pues, me sorprende no tener ganas.

 

Se cual es el medicamento que requiero, por eso al encontrar una cápsulas tipo balinas estoy seguro de que son ellas, cuando leo dicho nombre esta confirmado: Senosiain.

 

Perfecto.

 

Cuando veo lo pequeño que es y recuerdo donde se supone que tiene que ir, pues, veo el problema y la incomodidad de lo que dicha cosita me traerá.

 

— Maldita enfermedad.

 

Vuelvo a la cocina con esa cosa en mi mano, guardo todo en su lugar y dejo el vaso en el lava_vajillas, al entrar a mi cuarto me aseguro de que mi cámara este apagada como la de mi laptop, seguido verificó mis ventanas asegurándome de que nadie vea hacia el interior de mi cuarto, para asegurarme las cierro.

 

Es mejor prevenir, no quiero a nadie viendo como me pongo esa cosa en el culo.

 

Ya que no tengo una camiseta puesta sólo me quito mi pantalón de vagabundo como mi bóxer para subirme en la cama y colocarme en una de las posiciones más deplorables.

 

En cuatro.

 

Que me jodan si alguien me ve...

 

— ¿Qué estás haciendo?

 

Sabía que el color se había marchitado de mi rostro mientras horrorizado veía a mi padre plantado a mitad de camino por el pasillo, su rostro girado hacia mi mientras sus ojos abiertos cual platos miraban con detalle la posición en la que me encontraba.

 

¡¿Esto es una jodida broma?!