C A P Í T U L O 10

NUESTRO DESTINO

CAPÍTULO DIEZ

Kyra

11 de Julio, 2017.

 

— ¿Dónde sea y cuando yo quiera?

 

— El límite es el cielo — apunto con su dedo el techo — Pero se que hasta ahora no sueltas la pregunta de oro, venga, no me reiré.

 

Mordi mis labios sintiendo la vergüenza cubrirme, es decir ¿cuan conforme debo sentirme al hablar sobre sexo con un desconocido? Yo creo que la respuesta es cero ¡no se puede!

 

— Bueno, como viste desde la mañana me evita y no es algo nuevo, los únicos momentos que puedo estar con o son cuando lo hago enfadar, como ayer, o cuando me meto en su cabeza — aquí viene la pregunta de oro — Si yo quisiera, supongamos, querer darle sexo oral ¿lo sentiría?

 

Se detuvo para mirarme con una ceja levantada, el sabia que esa no era la pregunta de oro, mientras su hada la linda Fiora volaba por mi cuarto sentándose una que otra vez sobre mi comoda y escritorio, el revoloteo de sus alas era la cosa más maravillosa de ver.

 

— Kyra, el puede sentir, oler, probar, tocar todo lo que tu sientas o le des, por ejemplo un beso obviamente lo sentirá, un abrazo por supuesto, pero vamos a tu verdadera pregunta — se giro para mirarme — El sexo.

 

— ¿El sexo?

 

Me señaló con su cepillo de dientes y era curioso ver como la pasta resbalaba de la comisura de sus labios y el con su lengua trataba de no dejarla caer, asquito.

 

— No te hagas la listilla conmigo, eso es lo que carcome tu linda cabecita y por si fuera poco sé que eres virgen.

 

¡¿Cómo mierda lo supo?!

 

— Vengo de un largo linaje donde lo mejor que hacíamos era ver la pureza de las personas además de cuando esperaban un bebé o cachorro en tu caso, como sea — agitó su mano en el aire dispersado su idea, para mirarme — Como veo que no tienes las agallas de decirlo lo diré por ti.

 

Enjuago su boca para acercarse a mi cama y mirarme.

 

— ¿Puedo perder mi virginidad si lo hacemos por modo de esto que me regalaste? — sonrei al escucharlo imitar mi voz, claramente su intento fue un total fracaso.

 

— Apestas para imitar ¿lo sabes?

 

Rodo sus ojos.

 

— Podría haber usado un hechizo pero me da pereza hacer todo el menjurje a estas horas, y hablando de hora — sus ojos fueron al reloj en la mesita a un costado de mi cama, yo también mire notando que eran las 11:03pm — Ya es muy tarde para seguir hablando ¿Fiora? Venga cosita es hora de dormir.

 

— ¿Dormir? — susurró acercándose a el quien abrió sus brazos y ella se acurruco contra su pecho cerrando sus ojos al sentir las caricias de Heder.

 

— Es muy linda — murmure a lo que él sonrió sin dejar de mirarla.

 

— Las hadas no confían de inmediato en el hechicero al que fueron creadas, debi ganar su confianza ¿sabes? No fue fácil ya que sólo me hablaba cuando le ordenaba cosas, era como un gatito al cuidado de ataques pero supe llevar todo en paz mostrándole que puede confiar en mi y aquí tenemos la prueba — volvi a mirarla cuando terminó, ella parece un bebé recostada contra su pecho — Bueno, hasta mañana Kyra, duerme bien y no te desveles.

 

— Buenas noches, a ambos.

 

Estaba por irse cuando:

 

— Con respecto a tu pregunta, no es posible ya que todo se da en tu mente — señaló su frente a lo que me sentí algo aliviada, no es que pensara tener sexo fantasmal con Cole pero la curiosidad carcome con furia.

 

— Gracias.

 

Asintió para salir de mi cuarto e irse al suyo que estaba a cuatro cuartos del mío, había acertado con Cole cuando dije que luego de acosarlo diría que si, desde ayer en la noche lo moleste hasta el cansancio donde no sólo lo acosté sino que le suplique para que dejará a mi nuevo amigo quedarse a vivir aqui y cuando eso no funcionó me fui con otra táctica, manosearlo.

 

Funcionó luego del beso cinco.

 

Yo estaba dispuesta a más y creo que el también porque en cierto beso sentí como sus labios se precionaban ansiosos contra los míos, veo un futuro que brilla con alegría, pero desafortunadamente dejo el acoso y me contestó que se podia quedar sólo si ayudaba cuando sea requerido.

 

La respuesta afirmativa de Heder no se hizo a esperar y tras eso el mismo Alpha Cole Black decidió cual sería su cuarto, ya debería haberlo suponido, pero cuando escojio su cuarto y vimos que está un poco lejos del mío nos dimos cuenta de su oculto propósito.

 

Suelto un suspiro para levantarme y apagar la luz de mi cuarto, ya todos estan dormidos nosotros éramos los únicos despiertos...o eso creo ya que puedo escuchar como una puerta se abre y el sonido del agua escurrir.

 

Sé que no es Heden, ya que me ha contado que en las noches no se ducha por lo que supongo es mi madre o Cole, ruego porque sea él y pueda verlo con todos sus atributos. Me recuesto y apretando mis ojos hago que mi mente vaya a un vacío y entre en la mente de mi mate.

 

El cual está acostado en la cama con un brazo sobre su rostro, sin camisa y con un pantalón de dormir...yo estoy a su costado por lo que puedo ver que el lado de mi madre está vacío así que ella se está bañando ¿por qué? Olvidandola me acerco a el para subirme a horcadas suyo mientras mis dedos delinean la dura perfección de su marcado abdomen.

 

Está tan bueno.

 

Lo veo soltar un pesado suspiro, a mi parecer suena algo fastidiado.

 

— Mira Isabel no es mi culpa, no sé que demonios me pasa, sólo te pido que está noche por favor no me molestes.

 

— No tengo idea de que demonios hablas, mi amor.

 

Ante mi voz su cuerpo se tensa, su brazo se va para mostrarme un rostro sorprendido que pasa de la sorpresa al horror, se sienta sin quitarme de encima suyo acercándose a mi.

 

— Maldita sea ¡no puedes estar aquí! — susurra lo más bajo que puede a lo que yo rodeo su cuello con mis brazos pegando nuestro pechos ¿saben que sólo estoy con mi sostén y bragas? Odio dormir con ropa así que sólo uso mi ropa interior.

 

— Yo no estoy aquí, por lo menos no en cuerpo.

 

Agarre un puñado de su cabello para empezar a rascar su cuero cabelludo con mis uñas, lo sentí relajarse debajo mío para cerrar sus ojos y dejarse caer hacia atrás con su cabeza sobre la almohada.

 

— No me hagas esto, por favor.

 

— Yo no...

 

— Eres tú el que me hace esto Cole — lo interrumpió la cabreada voz de mi madre, voltee a verla cuando mi padre se tenso haciendo que su atención este fija sólo en ella — No te entiendo ¡llevas días sin tocarme! ¿acaso ya no te gusto?

 

Para obtener respuesta se gira dejándome ver que lleva puesto un conjunto de lencería color piel, luce increíble, volteo a ver a mi mate pero el parece luchar por verla ya que al yo girar dejo un poco de mi pecho al descubierto y al parecer mi hombre es débil contra la piel, siento una caricia en mi muslo para mirar sorprendida que me está acariciando.

 

— Isabel, por la Diosa estoy cansado, sabes lo que paso en las puertas y no tengo tiem....

 

— ¿¡No tienes tiempo para mi?! — suelto un bufido harta con ella y eso que no llevo mucho tiempo de escucharla — Estuve toda la mañana preparando esta noche para nosotros, ya que el gran Alpha no ha estado disponible para mi ¡merezco estar con mi marido! ¡yo soy tu mate!

 

— No lo es — murmure tomando su cara entre mis manos delineando sus labios con los míos, el podría estarla mirando o eso parece pero estaba mirandome a mi — ¿Verdad mi amor?

 

— No lo sé — susurra hacia mi pero....

 

— ¿No lo sabes? ¿qué carajos significa eso?

 

El parpadea para levantar sus ojos a ella, pero parece que la acción lo molesta y descolocado suelta un gruñido.

 

— Cariño ¿por qué no vas a tomar tu baño? Te prometo que luego estaré listo para complacerte — hago una mueca al escuchar el tono empalagoso que usa contra ella.

 

Parece funcionar ya que ella se va, junto con una sonrisa, creo que se me está yendo el efecto seductor que traje al lugar.

 

— ¿Kyra?

 

Suelto un suspiro para hacer que mis labios formen una sonrisa que estoy segura luce falsa ¿por qué siquiera vine? Esperaba poder acariciarlo y tener uno que otro de los besos que amo robarle, deseaba tener toda su atencion en mi, pero ahora, se lo que la noche le depara y no me gusta estar al tanto de ello...cierro mis ojos dispuesta a irme.

 

— Ky...

 

Abrí mis ojos dejándome ver mi dormitorio, el cual está cubierto por la oscuridad y la absoluta soledad, me acuesto debajo la colcha y cerrando mis ojos sueño con un mundo donde mi mate me acepte.

 

(....)

 

17 de Julio, 2017.

Saud

 

— No hay manera en infierno que puedas seguir evitando la verdad gatita, en este momento me dirás por qué en el infierno has estado toda bipolar toda esta maldita semana, acaso....— detengo mi andar para fijar mi mirada en su abdomen, que gracias a que lleva una de esas camisetas ajustadas para hacer deporte que dejan ver totalmente su abdomen puedo verlo con mayor detalle, pero esta normal.

 

— ¿Qué estás haciendo?

 

— Chequeando a mi sobrino o sobrina — estoy dudoso pero espero estar equivocado, no quisiera saber como se lo tomaria el Alpha Black al enterarse que su hijita está embarazada.

 

Pobre mis oidos.

 

— ¿Qué demonios? ¡no estoy embarazada!

 

De abatida a cabreada.

 

Bipolaridad.

 

Claro síntoma de estar embarazada.

 

— Gatita, yo que tu voy buscando nombre a la criatura que tienes alli dentro y de una te voy diciendo ¿yo? Yo no cambio pañales, así que conmigo no cuentes con ello, te puedo satisfacer tus antojitos matutinos y toda esa mierda y......espera ¿qué haces con eso? ¡Kyra detente! ¡Maldita sea!

 

Froto justamente la parte donde me golpeó con el maldito bat ¿de dónde demonios lo sacó? ¡que importa! La mire cabreado mientras frotaba mi trasero ¿cómo pudo atreverse?

 

— Eres una maldita salvaje gatita, me encanta, pero en estos momentos el dolor es mayor al placer.

 

Rodo sus ojos mientras la veia sonreír.

 

¡Lo logre!

 

— ¡Sonreiste! ¡soy el puto amo! ¿¡quién lo es!? ¡papá lo es!

 

Salte emocionado mientras la veia ahora reír a carcajada, mi deber del día está echo pero aún así no estaba satisfecho pues ella no me decía la verdad completa, sé que debe ver con su padre ya que me he dado cuenta como se tratan desde hace un tiempo, ella es distante con él y la cosa es recíproca.

 

Estoy dispuesto a averiguar el qué.

 

Corro para llegar a su lado ya que desde el altercado con el avedonio se nos prohibió totalmente el ir a la montaña madre y si por lo menos no podemos hacer nuestra carrera entre los árboles allí, la podemos hacer por todo BigValley a las muy lindas horas de la mañana como a las 5am, sólo hacemos una hora y media dado que tiene que hacerle su desayuno a cierta cosita bonita y chiquita.

 

Devin.

 

Descubrí que es mi mate el día de su transformación cuando el aroma que emanaba su cuerpo se acentuó dando un delicioso aroma a canela que me volvió loco, había estado sumamente sorprendido y sumamente excitado al momento de obtener su aroma, las imagenes que habían pasado por mi mente no eran para nada sanas pues eran con esa cosita bonita debajo mío llena de placer mientras de sus labios escapaban penosos pero provocativos gemidos, con el y yo besándonos cual enamorados, con esa boquita de pecado tomando todo mi....como decía, Devin también se había dado cuenta por lo tanto me había evitado y ocultado su aroma por un periodo de tiempo, uno tan corto como cuando su hermana, mi mejor amiga, había aparecido de sorpresa en la manada cuando estabamos en medio ataque y no tenía ni una maldita idea de donde estaba mi pequeño mate.

 

No habíamos hablado para nada de nuestro asunto: el que somos mates ¿el ser ambos hombres me suponía un problema? Por supuesto que no, y ello me sorprende dado que siempre fui hombre de mujeres muy bien proporcionadas, no había sido como la mojigata de mi mejor amiga al dejar mi virginidad intacta.

 

No podía aunque quisiera.

 

Y no entendía como ella lograba mantenerse intacta.

 

— No está — la oigo susurrar haciendo que saliera de mis pensamientos y ver sorprendido que nos encontrabamos en el interior de la casa del Alpha — No, ni siquiera esta Heder.

 

¿Eh?

 

— ¿Heder? ¿quién es ese tal Heder? — le pregunté algo receloso — ¿No será tu nuevo mejor amigo, verdad?

 

— No seas idiota — murmuró golpeando mi hombro para alejarse — Heder es mi nuevo amigo hechicero, simplificando, lo ayude me ayudó y ahora le estoy haciendo un favor al dejarlo quedarse a vivir aquí.

 

— ¿Tu papá lo acepto? — más que sorprendido estaba herido, su padre nunca me dejó si quiera quedarme una tarde aquí ¿y este desconocido viene y lo dejan hasta quedarse a vivir? Eso está muy feo.

 

— Se negó al principio, me dio batalla pero luego...pu-pues...lo hice entrar en razón — miró hacia otro lado mientras empezaba a caminar hacia la cocina — ¿Dónde estarán? Siempre están en la mañana listos para un rico desayuno.

 

Me movi acercándome a ella.

 

— Escuché entre unos exploradores que el Alpha de la manada vecina pidió una reunión con tu padre — hurge entre las cosas en el refrigerador, había mucho que comer y mi estómago lleno de malditos bichos.

 

— ¿ColdVei? — me prepuntó a lo que asenti, tome una Coca-Cola de la refrigeradora pues tenía mucha sed — Bueno creo que iré....

 

La botella se me cayo al suelo provocando que se detuviera de hablar, rapidamente la tome y me acerqué a ella dispuesta a escucharla mientras abría mi cola.

 

— ¿Qué decias? — la mire y destape mi cola.

 

Y vi con asombro, sorpresa y diversión como chocaba contra ella una ola de espumosa gaseosa, ella cierra sus ojos para levantarse en puntitas y mirarme cabreada con la bocota abierta.

 

— ¿Ups?

 

— ¡Saud!

 

Me encoji un poco al escucharla gritar, tomó los bordes de su camisa tirando lejos de su piel, pero era algo inevitable, vio la mancha y luego a mi.

 

— Tu...esto...ya veras...¡voy a darme una ducha y quiero un buen maldito desayuno cuando baje!

 

¿Cómo?

 

— ¿Cómo, desayuno? ¿¡por qué yo!? ¡pero Ky...— me lanzo una mirada envenenada haciendo que me echase hacia atras...— ¡Desayuno! ¡amo hacer el desayuno! ¡te desmayaras de lo jodidamente bueno que estara!

 

Deje una sonrisa en mis labios mientras ella desaparecía iendo al piso de arriba, cuando desaparecio solté un suspiro mientras me giraba a la cocina ¿cocinar? ¿sho? ¡pufff! ¿ósea? ¡pan comido, mascado y tragado!

 

....2 minutos después....

 

— Bienvenido a Cocinando en cinco minutos, hoy veremos como hacer un delicioso desayuno que tendrá: tortilla de huevo, unos waffles, rodajas de frutas y un fresco y nutritivo jugo de naranja.

 

— ¡Sólo quiero los jodidos waffles!

 

¿Por qué no puede haber un vídeo en youtube que me muestre sólo eso? ¿Será que no busque bien? ¿Poner un desayuno nutritivo y como hacer waffles estará mal? ¡no hay tiempo para dudar! ¡tengo menos de cinco minutos para que el desayuno este listo!

 

Adelanto para ver la forma de hacerlo, por suerte tenía todo lo necesario fuera...digo... podría haber echo un desayuno como los que a mí me gustan, ya saben la supertocinetaburguer es mi mayor logro y puedo asegurar que es deliciosa ¡inclusive me he echo una! ¡y estoy que babeo cual llama ante su exquisito aroma!

 

Pero.

 

Sé que Kyra prefiere un desayuno rico, nutritivo y dulce, por lo tanto creo que si ella desayuna éso también lo hace mi cosita bonita, con la estufera lista para mis waffles y la masa ya preparada la vierto en ella rellenandola para dejar caer la parte de arriba y que se cocinen.

 

Sólo cinco minutos y el desayuno más delicioso estará listo.

 

El aroma de los waffles empieza a llenar la cocina y es cuando corro y los sirvo en dos platos, dejo la nutella cerca, algo de miel -a cierta cosita le encanta- la jarra con jugo de mango cerca obviamente fría, tres vasos y un poco de fruta picada en cada plato.

 

Me paro frente a la mesa y veo mi obra maestra, pienso que se ve bien, estoy tan orgulloso de mi.

 

— ¡Huele delicioso hermanita!

 

Mi cuerpo se tensa por completo al escucharlo, mi corazón brinca de emoción mientras me muevo nervioso sin saber bien qué hacer.

 

¡Venga hombre! ¡es nuestro hombrecito!

 

Sé que lo es, no hay que dejar pasar esta oportunidad.

 

— ¿Sa-Saud?

 

Tomo un hondo suspiro de aliento para voltear y retener en seguida un gemido al notar que está recién bañado, su piel está rojiza, suave y fresca ¡quisiera morder sus mejilla! Pero también besarlo y hacer cositas indecorosas con el.

 

Muchas cosita, muchas.

 

— Buenos días cosita linda — ante mis palabras, o eso creo, un sonrojo cubre sus mejillas.

 

No, no puedo comportarme tan modesto con el ¡sólo no puedo!

 

Ahorita me lo como.

 

Me acerco a paso decidido hacia él quien me mira nervioso, tomo su cintura con una mano para pegar su cuerpo contra el mío y dejar mi otra mano agarrar su nuca guiandolo a mi.

 

— ¿Sau....

 

No lo dejo hablar, hago que sus futuras palabras mueran con la presión de nuestros labios porque eso es, en un principio sólo es una dulce y simple presión, siento sus manos contra mi pecho tratando de apartarme de su cuerpo pero debe saber que no podrá yo lo supero, es hora de que sepa quien manda aquí...abriendo mi boca contra la suya dejo que un gruñidos de advertencia se filtre entre mis labios, al principio su cuerpo se tensa pero luego sus brazos toman vida rodeando mi cuello para entregarse en bandeja de plata.

 

— Bésame Saud, te necesito, besame.

 

Vuelvo a gruñir ante sus deseosa suplica y es que ante tan linda súplica no podría negarme, tomo su labio lo muerdo lo chupo dejo mi lengua entrar por su boca para llevarnos en una candente lucha de lenguas ¡su sabor es delicioso! Deslizo mi mano por su trasero dándole un fuerte apretón para subir y llevar mis manos dentro de su camiseta tocando directamente su suave piel que parece hacerse de gallina ante mi toque.

 

Suelto un gruñido frustrado cuando se aleja y respira agitado, no se cuanto tiempo llevamos besandonos pero al ver sus labios rojos e hinchados sé que fue durante un buen tiempo, sus mejillas lucen sonrojadas y sus ojos brillan al chocar contra los mios.

 

— Cosita mía, te amo ¿lo sabes, verdad?

 

Sus ojos me dan una tierna mirada para poco a poco ver como sonríe contento, ver su felicidad hace que sonría satisfecho, mi lobo quiere aullar al al fin tener a nuestro mate.

 

— Lo se, yo también te amo mí hombre.

 

Gruño satisfecho contra sus labios ante sus palabras, deseoso aprieto su trasero.

 

— Sólo tuyo.

 

— Por supuesto que sólo mío — susurra posesivo y me encanta, para con su lengua lamer mi labio inferior, esa acción me puso terriblemente cachondo.

 

¿Mate? Más que echo...aunque puedo trabajar más en ello.

 

¿Averiguar el por qué de que mi mejor amiga este triste? En proceso, pero sé que averiguare todo el embrollo que creo está metida.

 

— ¿Hiciste el desayuno?

 

— Lo mejor para mi cosita bonita.

 

Lo mejor.

A N T E R I O R         -           S I G U I E N T E