C A P Í T U L O 12

 NUESTRO DESTINO

CAPÍTULO DOCE

Kyra

21 de Julio, 2017

 

Hoy tengo ganas de unas bruschettas.

 

Pero haría el tipo de las que me gustan, ya que las bruschettas más populares llevan tomate, lechuga y otros vegetales, es italiana asi que por su puesto que los lleva pero a mi me gusta con algo que pueda incarle el diente obtener el sabor del aliño, de lo jugoso de un tomate, de lo crujiente del pan y que al saborearlo sea una explosión de ricos sabores.

 

Por eso, la carne es mi fiel acompañante...un sabroso recorte de res, aliado con comino, sal y otras cosillas le darán un sabroso aroma y sabor ¡la boca se me hace agua! La carne ya está lista, aliñada, pero aún no cocinada eso lo dejo para el final ya que me gusta que mi plato este recién echo....alli es donde uno más disfruta de los sabores.

 

La mitad de la hogaza de pan que encontre estaba cortada en pequeños cuadritos y le puse un poco de mantequilla derretida por encima, es algo que me gusta ponerle, ahora estoy esperando que mi agua se caliente ya que tengo muchas ganas de un te, como nunca, ya que casi no soy de tomarlos pero he descubierto un té que es rojo...dicen que es dulce al paladar y voy a averiguarlo.

 

De reojo veo las verduras que debo cortar para hacer un poco de ensalada, eso echaré encima de mis pedacitos de cortes de res ya cocidas, gire mi cabeza y mire el reloj....marcaba las 12:36pm y a estas horas mi madre se va a pasear y mi Cole llega, quizás pueda compensar mi actitud de ayer.

 

Pobrecito mi amor, casi rogaba por un poco de jugueteo.

 

Pero ayer no estaba de ánimos para mirarlo, menos cuando el no lo hace conmigo, suelto un pesado suspiro mientras veo atravez de las ventanas traseras, amo el bosque y tengo ganas de salir a dar un largo paseo, pero antes un buen desayuno.

 

Si, desayuno, no fue hace mucho que llegue de ir a correr con Saud, no es como si fuera la gran cosa dado que corremos alrededor de la manada pero algo es algo y siempre es bueno ver como se queda atrás.

 

Entrecierro mis ojos cuando veo algo moviéndose por los arboles, me acerco con todos mis instintos alertas pero cauta porque podría ser un indefenso animal.

 

Pero al ver el rostro de alguien me alarmo y salgo corriendo detrás de tal persona, no pienso en nada, menos que estoy medio desnuda corriendo detrás de quien posiblemente pueda ser un rogue.

 

¿Qué estaria haciendo por aquí un exiliado?

 

No pienso más y paso entre los árboles persiguiendolo, pero mientras más me acerco más ainco le pone por desaparecer de mi vista, y por desgracia lo pierdo pero aún tengo su rastro su aroma que me parece reconocer como el de....mi cuerpo es llevado hacia tras mientras con brusquedad una mano toma mi cuello llevandome contra un árbol.

 

— ¿En serio crees que puedes contra mi?

 

Al mirarlo al rostro y ver una marca cruzando su ojo, sé, con seguridad quien es. Retengo saliva en mi boca y se la escupo en la cara obteniendo que me suelte al instante, momentos desesperados requieren medidas desesperadas y algo asquerosas.

 

— ¡Maldita perra!

 

— ¿Qué demonios haces tu aquí? Luego de que nos atacastes ¿regresas? ¿qué mierda contigo?

 

Levanta su rostro para mirarme cabreado, sus manos siguen limpiando mi saliva para luego pasarlas por su pantalón y señalarme.

 

— Tú, mocosa, no lo entenderias.

 

— Pruebame.

 

Sé que no deberia estar hablando tan tranquila con el, ni siquiera deberia estar hablándole debería estar partiendole la madre pero por algún motivo no lo hago y lo escucho.

 

También se que es un Alpha y que ese día que nos atacó nadie, absolutamente nadie, salió herido.

 

— ¿Quién es tu madre?

 

Lo mire confundida.

 

— ¿Qué?

 

— ¿Quién es tu madre? ¿cómo se llama? — parece desesperado como si la respuesta fuera clave para su vida.

 

— Isabel.

 

Se detiene para mirarme confundido, negar y dar un paso atrás.

 

— Eso es imposible — vuelve a negar y mirarme molesto — Dime la verdad, no estoy para malditos juegos.

 

— Mi madre es Isabel....

 

— ¡No! ¡No lo es! — se me acercó a lo que frunci el ceño para mostrarle mis caminos y gruñirle, que no se acerque a mi o le rompere un huevoe el solo bufo — Tu madre es Lucia.

 

— ¿Lucia? — si mal no recuerdo ese era el nombre de mi tía, la hermana gemela de mi madre ¿pero qué tiene que ver ella aqui? — Tu estas equivocado, mi madre se llama Isabel y mi tía es Lucía.

 

¿Por qué estoy hablando con el de mi familia?

 

— ¿Tú tia? Pero ella...a ver muchacha tu dices que tu madre es Isabel y Lucía es tu tía, pero el día del ataque...y tu naciste....

 

Pasó la mano por su cabello, parecía confundido y yo también lo estaba ¿de qué demonios está hablando?

 

— Ese día Lucia murió, pero, el día que los ataque su aroma estaba en todas partes...mayormente en ti...por pso, por eso crei....

 

— ¿Su aroma? ¿cómo puede estar su aroma si ella está mue....

 

¿Lo esta?

 

Si mi madre estuviera muerta y como ella era la mate de mi papá, Cole no tendría mate por lo tanto si la que creía que era mi madre lo muerde la marca no perdurará porque no es su verdadera mate....su mate soy yo, porque el no tiene una mate viva.

 

Me acerqué a él.

 

— ¿Cómo puedes saber que ella está viva?

 

— Su aroma, Lucia era mi mate.

 

Abro mis ojos sorprendida, pero a la vez pienso en lo que siquiera estoy dando por echo, mi madre murió el día de mi nacimiento y mi tía se hizo pasar por ella todos estos años para estar junto a Cole.

 

Eso explica el por qué yo soy su mate.

 

— ¿Cómo puedo confiar en tu palabra? Estas diciéndome muchas cosas mi madre muerta y mi tía viva tomando su vida ¿por qué ella haría eso?

 

— Lucía era codiciosa, todo el mundo sabía eso de ella, sus padres aún asi la amaban y daban todo por ella como también por tu madre, su mas grande deseo era ser Luna de una manada....

 

— ¡Pero tu eres un Alpha! ¿por qué no quedarse contigo y dañar la vida de mi familia?

 

No lo entiendo.

 

— Ella quería ser Luna pero de tu padre, su codicia era mayor a cualquier cosa y tomaba todo lo que una vez fue de tu madre, ella tenia celos de Isabel por tener lo que ella siempre quiso.

 

— ¿Por mi padre? ¿Sólo por eso lo hizo?

 

— Ella mando a matar a tu madre.

 

Lo mire desconfiada.

 

— Al parecer estas muy informado ¿cómo me tomó aquello? ¿fuiste parte de todo ello? Te juro que si tuviste que ver voy a acabar con tu puto trase....

 

— Éramos amantes — me interrumpió — Iba a verla cada vez que podía, cuando supe que era mi mate y se lo dije me engañó dejandome creer que la idea de ser mia le encantaba, pero días antes de que le pidiera ser mi Luna escuche como planeaba algo contra tu madre, algo que no pude evitar.

 

— ¿Por qué? ¿por qué demonios no pudiste? ¡era mi madre! ¡pudiste salvarla!

 

— ¡Aún no era Alpha! Mi padre me mantuvo cauto todo ese día y aunque intente ir, no pude, no hasta que fue muy tarde y supe que Lucía había muerto a manos de vampiros.

 

Se pasó la mano por el cabello.

 

— Cuando pasó eso quede destrozado y pensé que pronto llegaria mi otra mate, pero había algo que me tenia confundido, aún sentía lleno el vacío que la muerte de mi mate debió haber dejado, por eso vine...por eso los ataque quería ver a todos, quería verla, pero te vi a ti y su aroma en todas partes.

 

No sabía si creerle, pero no parecía mentir y era duró creer todo esto cuando dos yo se peleaban queriendo y no queriendo aceptarlo, mi parte de hija no quería aceptar que su madre estaba muerta y mi parte de mujer, la parte que es mate de Cole, quiere saltar con entusiasmo al saber que por fin sera nuestro.

 

— ¿Por qué no vas a la casa y vas por ella?

 

— Tu padre — gruño la palabra — No me dejara entrar luego de haber atacado a toda su manada.

 

— Bueno, hombre, esa no fue tu jugada maestra ni la perfecta.

 

El bufo y mire hacia atrás, tenía que regresar deje la olla del agua prendida.

 

— Ve por ella, es tu mate y la verdad me está dando grandes problemas con su mentira — me miró confundido, venga que no iba a contarle mis problemas — No es algo que te incumba, por el momento no diré nada de ella no siendo quien es y es mejor que hagas pronto la cosa de ir por ella antes de que pierda mi paciencia.

 

Me di la vuelta sin esperar respuesta alguna, no la necesitaba de él, la necesitaba de alguien más y yo iba a buscarla.

 

Entre por las puertas y fui directamente a la cocina deteniendome cuando vi a Cole y Heder mirándome.

 

— ¿Dónde estabas? — pregunto mi hombre imposible, me sentia con ánimos de besarlo hasta el infinito y hacerle cositas no aptas para jóvenes.

 

— Crei ver algo — me encoji de hombros y pase entre ambos no sin antes darle un apreton al miembro de mi hombre, el salto lejos de mi haciendo que riera.

 

— Por favor, si van a hacer sus cositas de tocarse, por favor que no sea frente mío — mire a mi amigo Heder, curiosa y algo resentida.

 

— ¿Dónde has estado? Desapareciste por días.

 

Me acerqué a la cocina y tomando un sartén le eche un poco de aceite prendo una hornilla y la dejo encima de ella dejando que se caliente.

 

— Querida yo también tengo mis asuntos, y puedo decir que estoy satisfecho por el momento — por su cara podía decir con seguridad que había estado de follon — No puedo decir lo mismo de ustedes, Dios el ambiente está tenso y caliente ¿por qué no dejan que la cosa suceda?

 

— Esto no te incumbe muchacho — vi sorprendida como Cole le respondio — Esto es entre Kyra y yo.

 

— Oh ¿hay algo entre ustedes? — nos señaló a lo que le suplique con la mirada a que no se atreviera a seguir, Cole era sensible con este tema, pero el no me hizo casi — Se que sigues rechazandola y ella sigue detrás de tus huesitos, pero que va no es mi problema.

 

Cojo el tomate y una manzana verde, quiero ponerle algo de sabor...la corto en pedacitos.

 

— Podrían pasarme el queso mozzarella .

 

No le pido a nadie en conqueto, pero cuando un brazo grande con sus músculos todo marcados sé que mi hombre me lo ha dado, lo tomo y poniéndome en puntas le doy un beso en su mejilla.

 

Uno rápido.

 

— Gracias lobito.

 

Veo que se aleja de mi sentándose en una silla cerca de la encimera, Heden cerca suyo me mira lo señala y me dice que lo bese, le guiño un ojo mientras me concentro en sacar el queso cortarlo en pequeñas partes, voy a donde deje la carne para sacarla y mandarla al sartén.

 

Al instante el rico aroma de esta nos envuelve haciendo mi paladar saliva y cierto estómago rugir.

 

Me giro para mirar divertida a mi hombre imposible que se remueve incómodo para mirar del sartén a mi, Heden se ríe y yo también.

 

— Preciosa te diría que me guardes un poco pero no me voy a quedar, tengo una sabrosa invitación — se frota las manos mientras veo a mi padre tensarse — Pero eso huele delicioso, por supuesto tu solo haces delicias, en la noche tu y yo tendremos una charla, esperame en tu cuarto lista.

 

— ¿Qué demonios significa eso?

 

Mi hombre curioso se gira para verlo pero mi escurridizo amigo ya se ha ido y el no se da cuenta cuando yo me acerco y tomando su rostro entre mis manos dejo mis labios caer sobre los suyos y besarlo con pasión, se queda tieso pero en un momento dado lo siento soltar un suspiro y seguirme el beso, muerdo su labio y es allí cuando el se separa.

 

— Kyra, por favor, podrías controlarte.

 

— Podría ¿pero quiero? No lo creo — me atrevo un poco más poniéndome a horcadas suyo, el no se mueve pero mira mis pechos — ¿Te gustan? Son todos tuyos.

 

El traga y cierra sus ojos, sonrió divertida para abrir un poco más mis piernas e inclinandome hacia adelante presionandome contra su polla que se clava en mi centro, gimo contra su boca en el momento justo que el abre sus ojos y al escucharme gruñe y me quita de su regazo.

 

— Basta — ordena y yo rio tontamente mientras me acerco a la cocina y giro la carne y dejo el queso derretirse contra la plancha.

 

— Eso no me pedías ayer — murmure y el me fulmino con la mirada — Querias un poquito de mi Cole y sabes que lo puedes tener cuando quieras, mi cuarto está siempre abierto para ti.

 

— Tu yo nunca haremos....

 

— Nunca digas nunca — dejo a los pedazos de pan tostarse un poco y pongo unos diez en un plato, luego la mozzarella.

 

Chequeo la carne notando que aún le falta un poco, creo que no tomaré ese te.

 

— ¿Acaso tu no lo deseas? — me giro y lo miró, el tiene esa mirada sería que me hace sonreír.

 

— ¿Qué cosa?

 

— Follarme, hacerme el amor — nuevo mi mano a mi monte acariciendome, el traga viendo mi mano — Me siento muy sola en la noches Cole, mi mano ya no es suficiente para satisfacerme.

 

El agranda sus ojos con sorpresa cuando entiende mis palabras.

 

— Las fantasías contigo tomándome son buenas, pero quiero la realidad ¿acaso tu no lo deseas? — dejo mi mano subir a mi pecho y deshacer dos botones dejándolo ver mis pechos — Sueño contigo lamiendo mis pezones, chupando con fuerza estando entre mis piernas tomando lo que solamente tu puedes tomar, mi virginidad.

 

— ¿Qué?

 

Sonrió tímida.

 

— ¿Sorprendido? No deberías estarlo, siempre he querido que la persona que tome mi virginidad sea mi mate, el primero y el último, dejarlo disfrutar de mi cuerpo es el único regalo que puedo darle.

 

— Kyra, yo...

 

Me acercó y deslizo mi mano por su bulto, un gruñido vibra en su pecho y con su mano intenta debilmente separarme, le doy un apreton que lo hace crecer.

 

— Serás mío, mi amor, pronto....ya lo verás.

 

Lo suelto y girandome sacó la carne y coloco en porciones sobre cada pedazo de pan para luego poner un poco de tomate en su cima...solo manzanas para mi.

 

— Espero que te guste.

 

Dejó frente suyo el plato que el mira maravillado, tomó uno y lo mastico, gimo porque sabe delicioso, a lo que el no espera para probar.

 

— Mierda, sabe delicioso.

 

— De nada — lavo todo lo que use para de vez en cuando tomar uno que otro y comer, al terminar lo mire y el aún no se los acaba, está con los ojos cerrados masticando un trozo — No estaré esta tarde, por lo tanto mamá va a cocinar.

 

El abre sus ojos y me ve horrorizado.

 

— Buen provecho mi lobito.

 

Debo averiguar muchas cosas.

A N T E R I O R            -           S I G U I E N T E